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La enfermedad de insuficiencia venosa, que hoy en día es más común, especialmente en personas que trabajan de pie, es la insuficiencia de las válvulas venosas. Las válvulas venosas tienen una estructura que permite que la sangre fluya en una dirección hacia el corazón. Con el tiempo, estas válvulas no pueden enviar sangre al corazón dependiendo de la gravedad y, cuando no lo hacen, se produce una acumulación hacia atrás y las válvulas se abren más. Como resultado, la enfermedad de insuficiencia venosa se vuelve cada vez más grave. La hinchazón de los pies aumenta y pueden aparecer varices en las piernas. Llega un momento en que esta hinchazón y las varices provocan calambres. Después de un tiempo, puede producirse una decoloración de los pies.
El diagnóstico definitivo de enfermedad de insuficiencia venosa se realiza mediante examen clínico y ecografía Doppler color.
Las venas son los vasos que transportan la sangre sucia desde el cuerpo al corazón. En la insuficiencia venosa, que se produce debido a defectos en las válvulas de las venas, la sangre se acumula en las piernas como resultado de que la sangre no se envía hacia el corazón. Además, este problema puede ocurrir debido a obstrucciones en las venas debido a algunos factores como los coágulos. Los factores de riesgo de insuficiencia venosa incluyen la predisposición genética, trabajar de pie durante largos períodos de tiempo, el sobrepeso y el tabaquismo.
La insuficiencia venosa es una enfermedad que progresa continuamente una vez iniciada. En este proceso, puede manifestarse con formaciones de varices en las piernas. Los principales síntomas de la enfermedad de insuficiencia venosa son:
La enfermedad de insuficiencia venosa puede ocurrir en venas superficiales o venas profundas. Por lo tanto, en el tratamiento de esta enfermedad, primero se debe determinar claramente si el problema está en las venas superficiales que ayudan a llevar la sangre sucia al corazón debajo de la piel o en las venas principales más profundas y se deben aplicar los tratamientos correspondientes. Sin embargo, se debe investigar la causa de la enfermedad y si existe un factor subyacente. Si el médico lo considera apropiado, en algunos casos se pueden recomendar medias de compresión. Entre las opciones de tratamiento se encuentran aplicaciones como la extirpación de la vena con cirugía, láser y radiofrecuencia. Además, se pueden realizar cirugías de reparación de válvulas venosas. En los casos en los que es necesario abrir una vena bloqueada, recientemente es posible ampliar la obstrucción con un globo y colocar un stent. Es extremadamente importante diagnosticar la enfermedad de insuficiencia venosa en una etapa temprana y aplicar el tratamiento necesario antes de que la enfermedad progrese.
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